18 de septiembre de 2011

ESCRITO A MI ABUELO TOMAS MONTIEL


Todo consiste en sabores de familia
sola con mi abuelo me dispongo a
platicar con él sobre libros,
tiempos no compartidos
amor de distancias
niveles de conciencia heredada.

Hay opciones, pero se presentó
Con uno de sus mejores gustos.
Sustancia naturalmente relajante,
Oscura a la luz de una ventana,
que promete deseos, no esta llegando
a nada sólo a acompañarme
en mi espacio, en el pre ensayo
de lo que podría llegar a ser.

Abuelo respóndeme a través de los libros
si estás de acuerdo con las locuras de tu nieta
siéntate a un lado y escribe en la servilleta
lo que ves en mi futuro,
si lo ves en mi futuro.

Que tanto sabes de mi misma,
más allá de los certificados,
como definirías mi esencia
no seas abuelo consentidor,
por las canas que nunca tuviste
dile a tu nieta que las ansiedades
en sus pensamientos son sólo
buenos augurios.
Eres tu en ellas.

Consuélame, despiértame,
con cosas eternas
hacia la vida
con mucho mucho
deseo y amor.

El tiempo no se siente
cuando se diáloga con los antepasados,
al menos con los más amados.

Mi abuelo estuvo aquí,
me leyó “El Principito”,
los abuelos hacen eso no …

No fue sólo una historia más,
me envió mensajes,
me dio los mejores consejos y,
hasta me trajo un regalo:
“quinientos millones de estrellas,
de risas, de cascabeles …”


¡Y ninguna persona grande comprenderá
Jamás que tenga tanta importancia!


Esperanza Montiel